Por Carolina Fernández Blanco
29 de julio de 2024
Las campañas electorales parecen cada día más dramáticas, más antagónicas, para todos los participantes resultan juegos de suma cero en los que se dirimen alternativas absolutas. Los gobiernos elegidos democráticamente coquetean con el autoritarsimo como una caja de herramientas de gobierno cada vez más aceptable, o al menos, lo hacen de un modo público que antes hubiera sido inadmisible, que hubiera requerido al menos una pátina de hipocresía en homenaje a los valores democráticos. Los discursos públicos apelan a comunidades altamente polarizadas.
¿Cuál es el lugar de la deliberación en estas democracias contemporáneas? ¿Qué limitaciones impone la polarización política a la coversación pública? ¿Es posible realizar mejoras en los procesos legislativos y de elaboración de las políticas públicas, de acuerdo a estándares de debate, de lógica y de uso de evidencia científica?
Proyecto Disonante realizó durante junio una capacitación sobre “Legislación y diálogo” en la que presentó conceptos y propuso discusiones en torno a esas preguntas. Fue un curso virtual, sincrónico, con contenido teórico y actividades prácticas. Participaron actores político-institucionales de toda latinoamérica: legisladores, asesores legislativos, funcionarios de diversos niveles de gobierno, investigadores académicos. La Red de Innovación del National Democratic Institute convocó a Proyecto Disonante para encender esta conversación y buscar en conjunto caminos para fortalecer la deliberación democrática y protegerla de los ataques de un clima global de polarización extrema.
Queremos promover mejores conversaciones públicas, que permitan que los ciudadanos ejerzan su derecho a ser parte de los procesos de toma de decisión, y evitar que estas situaciones se transformen en caminos sin salida del antagonismo entre identidades. Esperamos repetir y profundizar esta experiencia en un futuro cercano. Agradecemos a NDI y a los participantes la posibilidad de escuchar y de ser escuchados.
Programa del curso
Módulo 1
Herramientas y modalidades de participación multiactor en la discusión de políticas públicas y de normas. Relevancia e impacto.
El foco de este módulo es el conocimiento y la puesta en discusión de mecanismos prácticos que abren los procesos de toma de decisión a los ciudadanos. Desde talleres participativos a asambleas ciudadanas, hay una multiplicidad de instancias a nivel local, nacional e internacional que permiten a los ciudadanos y a las organizaciones de la sociedad civil establecer diálogos con gobiernos y organismos internacionales.
Módulo 2
Dificultades y potencial de la discusión pública en contextos de polarización extrema.
Las democracias contemporáneas y los foros internacionales desarrollaron las instancias participativas del Módulo 1. Sin embargo, un entorno cada vez más antagónico, con comunidades políticas cada vez más polarizadas, hace muy difícil que esos intercambios sean conducentes. ¿Cuáles son los riesgos que las falacias y los sesgos imponen a la comprensión mutua de quienes dialogan? ¿Cuáles son las ideas y las experiencias que hay para mitigar estos enfrentamientos? ¿Es posible mejorar las políticas públicas con mejores procesos de deliberación previos?
En este módulo revisamos conceptos, experiencias históricas e iniciativas que permiten dar respuestas a esto interrogantes.
Módulo 3
Un modelo posible de deliberación parlamentaria.
Los parlamentos son escenarios privilegiados de la deliberación, sin embargo, no es obvio de qué manera la discusión se transforma en deliberación. Tampoco es obivo qué modelos son viables, ni qué expectativas puede poner la sociedad en estos procesos. Es necesario conocer mejor qué contextos favorecen la implementación de modelos deliberativos y desactivar las condiciones que los pueden neutralizar.
Módulo 4
Leyes y políticas públicas basadas en la evidencia.
El diálogo entre las decisiones políticas y la evidencia científica parece algo propio de una época altamente tecnológica como la nuestra. Sin embargo, la incorporación de la evidencia cientifica a los procesos de toma de decisión requiere de condiciones institucionales y de actitudes de los liderazgos políticos.
En los procesos legislativos, por ejemplo, se han desarrollado mecanismos específicos para incorporar distintos tipos de evidencia (científica, técnica, jurídica). Esta incorporación también genera nuevos debates políticos: ¿hasta qué punto esto mejora la democracia o le impone límites? ¿Mejora la voz de la soberanía popular, o se la restringe? ¿Qué modelos proponen equilibrios aceptables de incorporación de la evidencia?